¿Cuáles son los gastos e inversiones de un corredor de propiedades?

Gastos de los Clientes

El corredor no paga los gastos de la operación de compraventa; estos gastos son responsabilidad del vendedor y del comprador. Los gastos notariales, inscripciones en el conservador de bienes raíces, redacción de escrituras y promesas, estudios de títulos, tasaciones, certificados o documentos requeridos para la transacción, y cualquier otro gasto necesario para que la transacción se realice, son exclusivamente a cargo de ellos.

Por parte del vendedor, se pueden incluir gastos opcionales como la reparación y embellecimiento de la propiedad para mejorar sus opciones de venta, o gastos obligatorios como levantar prohibiciones, si las hubiera. El comprador, por su parte, debe asumir todos los gastos administrativos de la compraventa. En caso de existir financiamiento bancario, estos gastos luego son cargados a la cuenta del cliente como gastos operacionales.

En resumen, tanto el comprador como el vendedor deben pagar sus respectivos gastos, exista o no un corredor intermediando. El corredor no interviene para pagar los gastos operacionales de sus clientes; más bien, el corredor se encarga de cubrir los gastos de su propio negocio.

Gastos e Inversiones del Corredor

El principal servicio de un corredor es vender o arrendar una propiedad, y para concretar estas operaciones debe cubrir ciertos gastos necesarios, principalmente en publicidad y traslados.

Por ejemplo, si un corredor que vive en Puerto Montt decide atender a un cliente en Osorno, deberá pagar por el letrero de 3m² que instale en el frente de la propiedad, el plan en varios portales inmobiliarios, sus campañas de marketing digital, y todos los traslados desde Puerto Montt a Osorno las veces que sean necesarias.

Estratégicamente, y para ahorrar en gastos, el corredor también podría considerar restringir su gestión a su barrio y utilizar un sinnúmero de herramientas gratuitas de promoción.

Estos gastos son de exclusiva responsabilidad del corredor, ya que son decisiones estratégicas propias, como trabajar una propiedad a 100 kilómetros de distancia, instalar letreros y pagar campañas de marketing digital.

Dado que en esta actividad los clientes son atendidos en terreno, el corredor no precisa obligatoriamente de una oficina de atención, secretarias, asistentes, personal de facility, etc. Sin embargo, cada profesional puede incurrir en los gastos que desee en su propio negocio, sin límites, salvo los que su propio criterio le indique.